Es importante especificar los criterios que establece la legislación española para ser considerado residente fiscal.
En primer lugar es importante especificar los criterios que establece la legislación española para ser considerado residente fiscal en España:
Una persona es considerada residente fiscal en España si permanece en territorio español más de 183 días o si no superando este límite, radica en España su núcleo principal o la base de sus actividades o intereses económicos.
También podrá ser considerada residente fiscal una persona que viva normalmente fuera de España pero su cónyuge y los hijos menores que dependan de ella sean residentes fiscales en España, salvo que se pueda probar su residencia fiscal en otro país.
Cuando se disponga de un certificado de residencia fiscal en el país donde se está trabajando, podrá justificarse en términos generales la no residencia fiscal en España, cuando el mismo se emita de acuerdo con el convenio de doble imposición internacional suscrito entre España y el país de referencia.
Es importante tener en cuenta que en caso de ser nacional español y residir en un país calificado por la norma española como paraíso fiscal, se tributará en España como residente fiscal durante el año en el que se produzca el cambio de residencia y los 4 siguientes. Es lo que se denomina la «cuarentena fiscal».
Fuente: Abc.es