Destacan el alto rendimiento recaudatorio de la Agencia por funcionario ante la última jubilación del 20% del personal.
Los inspectores de Hacienda son partidarios de que la Agencia Tributaria (AEAT) se dote de un régimen jurídico que la otorgue autonomía orgánica y funcional, con independencia del Gobierno y de otras Administraciones Públicas.
Así, se manifiesta en la propuesta de Estatuto para la AEAT elaborado por la Asociación de Inspectores de Hacienda del Estado (IHE), en la que se señala que debería fijar sus planes con respeto a la normativa tributaria, pero sin orientación alguna, más allá de los objetivos a medio y largo plazo que se fijen en materia recaudatoria y de lucha contra el fraude.
Plantilla avejentada
Advierten los inspectores que la edad media de la plantilla supera los 50 años, a que en los próximos años se jubilan varios miles de sus empleados, en torno a un 20 por ciento lo que supone, una grave situación, puesto que la AEAT tiene uno de los ratios más bajos de personal respecto a la población nacional de toda la OCDE y va a empeorar mucho en los próximos años.
Consideran, también que esa autonomía debería extenderse al ámbito financiero, con presupuesto, financiación, tesorería y patrimonio propios. Consideran que si se hubiesen mantenido desde 2002, en que se redujo al 5 por ciento, el porcentaje sobre los ingresos derivados de sus actos de liquidación, que era del 18 por ciento, Esta cifra hubiera permitido incrementar los recursos de la Agencia en un total de 2.416,58 millones de euros, con una media anual de 12,7,19 millones.
En su propuesta, los inspectores consideran que con este presupuesto se podrían haber incrementado el personal de la AEAT entre 1.700 y 4.900 funcionarios. De esta forma, consideran que con cifras medias de 3.000 funcionarios por 374.000 euros -según los ratios actuales de recaudación por funcionario- calculan que se hubiesen obtenido unos 1.122 millones adicionales; o con un incremento equivalente a 127 millones gastados en personal por 7,28 euros -relación entre recaudación y gasto de personal- este incremento hubiese supuesto 926 millones más.
Desde 1996 a 2015 se pasó de una rentabilidad sobre los ingresos líquidos de 4,5 euros invertidos en personal a 9,64 euros por euro invertido. Así, proponen como fuentes de ingresos, de una parte, los recursos derivados de la prestación de servicios como consecuencia de la administración y cobranza de recursos de otros Entes del Sector Pú- blico en virtud de Convenios establecidos con los mismos.
Además, el 18 por de los actos de liquidación que haya dictado en el ejercicio anterior, así como un porcentaje adicional de la recaudación bruta obtenida por encima de los objetivos derivados del Contrato de Gestión, del 25 por ciento de dicho plus, cuyo destino sería decidido por el Director General, hacia partidas de gasto corriente.
Cuentan también con el recargo de apremio de las deudas cobradas en período ejecutivo y con aquellos otros servicios que cobrados por la participación de sus funcionarios en tareas de intervención o auxilio judicial en procesos civiles –mercantiles- o penales por delitos económicos, en los que no exista contrapartida para la AEAT fuera de los casos de delito fiscal o de contrabando. Y, finalmente, como nueva partida de ingreso aconsejan establecer el cobro por determinados servicios prestados para otros Órganos y Administraciones.
Fuente: ElEconomista.es