Las rentas más bajas, es decir, aquellas inferiores a los 19.747 euros al año, se ahorrarán este año en el IRPF hasta 1.700 millones de euros por la bajada de retenciones aprobada por el Gobierno en febrero y que consolidó a finales de junio tras cambiar la Ley del impuesto. Esta modificación evitó que estos contribuyentes tuvieran que pagar lo retenido de menos en la próxima declaración de la Renta, que se realizará en la primavera de 2025.
El Ejecutivo, en paralelo con el incremento del Salario Mínimo Interprofesional (SMI) de 15.000 a 15.876 euros, aprobó el pasado febrero por vía reglamentaria dos grandes medidas que afectaban a las personas con menor nivel de renta. De un lado, incrementó a estos 15.867 euros el umbral a partir del cual se debe prersentar la Renta (es decir, quiénes ganen el salario mínimo o menos no tienen que hacerla) y, de otro lado, y para evitar errores de salto, rebajó la retención por trabajo (es decir, el IRPF que se retiene en la nómina) a los salarios por debajo de 19.747 euros.
Desde febrero, los contribuyentes afectados pagan menos IRPF gracias a esta normativa. Sin embargo, el legislador cambió la Ley del IRPF para consolidar la modificación a través del Real Decreto-ley del 25 de junio para evitar que los contribuyentes a los que se les ha retenido de menos por sus rendimientos de trabajo durante 2024, tuvieran que devolverlo en la declaración de la Renta de este año, que se presentará en 2025.
Y la cifra no es baladí. Según el último Informe de Recaudación presentado por la Agencia Tributaria, el correspondiente al mes de junio de este año, los contribuyentes con renta más bajas ya se han ahorrado de pagar en los seis primeros meses del año hasta 860 millones de euros a Hacienda por la reducción de las retenciones. Es decir, que aproximadamente esta cifra podría doblarse gasta los 1.720 millones de euros para lo que respecta a todo 2024, suponiendo un relevante varapalo en devoluciones para los salarios más bajos.
Ahora, el Gobierno va a convalidar dicho Real Decreto-ley en el Congreso a través del ‘Proyecto de Ley por la que se prorrogan determinadas medidas para afrontar las consecuencias económicas y sociales derivadas de los conflictos en Ucrania y Oriente Próximo y se adoptan medidas urgentes en materia fiscal’, tal y como publicó la web de la Cámara el pasado 30 de agosto. El texto, que se tramitará de urgencia, destaca la importancia de realizar el cambio en la Ley del IRPF.
«Resulta necesario», indica, cambiar la ley del IRPF para evitar que las personas que cobran el SMI o menos, no tributen, y , también «evitar que la rebaja en la cuantía de la retención derivada del nuevo marco reglamentario no se consolide en la declaración anual en caso de estar obligado a su presentación». «En el caso de la reducción del rendimiento neto del trabajo en el Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas, cabe señalar que la necesaria seguridad jurídica que debe conllevar la tributación por esta figura, dado su alcance en la ciudadanía, obliga a acometer, con la máxima celeridad, la consolidación de las medidas ya aprobadas por la vía reglamentaria, en la declaración anual de quienes resulten obligados a su presentación», añade el Proyecto de Ley.
Fuente: El Economista