Gregorio Izquierdo, director general del IEE
Para Gregorio Izquierdo, el Gobierno tiene margen para moderar la inflación. «La prioridad máxima no puede ser otra que evitar espirales de
precios y salarios, a lo que podría ayudar un pacto entre los agentes sociales que debería intentar evitar cualquier tipo de indiciación». Asegura en este punto que una mayor intensidad en la consolidación presupuestaria por la vía de la mejora de la eficiencia del gasto público podría haber tenido también un efecto atemperador en la inflación.
Juan E. Iranzo, director de ArmadatA
Juan Iranzo apunta claramente las tres medidas de pronta aplicación para contener el IPC. Aboga por «bajar el IVA del gas natural, eliminar transitoriamente impuestos sobre la electricidad y reducir tributos sobre los hidrocarburos». Además, ve necesario modificar el sistema de cálculo de las tarifas eléctricas reguladas.
José Ignacio Conde-Ruiz, subdirector de Fedea
El catedrático José Ignacio Conde-Ruiz señala como principal medida que contendría la escalada de precios el «desacoplar el precio del gas a la electricidad» e «intentar frenar los canales a través de los cuales los shock de la energía se trasladan a los bienes». También apunta que para evitar la espiral de precios y salarios «habría que acabar incluyendo salarios y márgenes empresariales en el pacto de rentas, e incluso a las pensiones».
Juan Fernando Robles, profesor de Finanzas en el CEF
Juan Fernando Robles aboga por una bajada quirúrgica de los impuestos: «Habría que intentar reducir impuestos en aquellos productos que sean más inflacionarios y que tengan una alta carga fiscal, como la electricidad y los carburantes». Y propone también reducir las retenciones al trabajo para liberar renta, que evitaría que la renta disponible real se viera disminuida. «Si no liberamos renta para que se dirija al consumo desde ya nos vamos a encontrar con un crecimiento muy exiguo este año y con una crisis», apunta.
Antonio Madera, analista jefe de EhiFinance
La prioridad para este economista debe ser proteger las rentas de familias y empresas para evitar una espiral de precios y salarios que perpetúe el episodio inflacionista. «¿Cómo? Con un mix de bajadas de impuestos indirectos y especiales, cuya eficacia a la hora de proteger las rentas está acreditada y crean menos distorsiones que los directos, y de ayudas directas a los hogares y empresas más vulnerables».
María Jesús Fernández, analista de Funcas
«Lo único que realmente se puede hacer para contener la inflación es desvincular el precio del gas del de la electricidad y es precisamente en lo que el Gobierno ha sido menos preciso», lamenta la economista senior de Funcas, María Jesús Fernández. La economista se muestra escéptica sobre la eficacia de la rebaja de 20 céntimos en el carburante para contener la crecida del IPC y cree que sería bueno alcanzar algún acuerdo a nivel de la Administración y de los agentes sociales para contener las subidas salariales, los beneficios empresariales y el crecimiento del sector público, pensiones incluidas.
Raúl Mínguez, analista de la Cámara de España
Para el director del Servicio de Estudio de la Cámara de España la medida más prioritaria es un pacto de rentas que impida la aparición de efectos de segunda ronda. «Hablamos de un pacto de rentas amplio: que abarque a trabajadores del sector privado, pero también a los empleados públicos e incluso a las pensiones, garantizando protección a las pensiones mínimas».
Mercedes Pizarro, directora de economía de Círculo de Empresarios
La directora de Economía del Círculo de Empresarios cree que dado el contexto es clave una rebaja de impuestos, pero «debe ir acompañada necesariamente de una reducción del gasto público improductivo, que compense como mínimo el alza del consumo e inversión privados y evite un incremento del gasto que pudiera tensionar la demanda y los precios». Opina que la intervención de precios que abandera el Gobierno «limita la libertad de los agentes económicos para hacer una selección eficiente».
Fernando Castelló, profesor de ESIC
El economista y profesor de ESIC, Fernando Castelló, no cree en la receta del Gobierno para combatir la inflación, ya que «a largo plazo, un control de precios termina provocando una mayor subida de los precios de determinados bienes o servicios». Castelló cree que en la actual coyuntura «hay riesgo latentes de estanflación».
Alicia Coronil, analista jefe de Singular Bank
«Se han adoptado decisiones de política económica que han elevado la presión fiscal sobre las empresas. Si no queremos perder competitividad con países como Francia, Italia o Alemania, el Gobierno debería bajar las cotizaciones sociales y el Impuesto de Sociedades». Alicia Coronil aboga por hacer un presupuesto base cero que limite las cuentas públicas de gastos superfluos y desidexar pensiones del IPC.
Javier Santacruz, economista
«Es necesario aplicar medidas desinflacionistas como bajar los impuestos indirectos de manera temporal y localizada, deflactar todas las tarifas impositivas , para restar capacidad del Estado de erosionar más el poder adquisitivo; y hacer reformas estructurales que incrementen la competencia en los sectores productivos», señala Santacruz.
Valentín Pich, presidente Consejo Economistas
Desde el Consejo General de Economistas de España, Valentín Pich apuesta por «rebajar los impuestos indirectos de forma selectiva», como ya han hecho países como Italia o Suecia. Además, defiende que el hipotético pacto de rentas «incluya también a pensionistas y administraciones públicas» y «estar muy atentos» a las políticas monetarias del Banco Central Europeo (BCE).
Juan de Lucio, profesor de la Universidad de Alcalá
El profesor e investigador asegura que cualquier medida aplicada de forma coyuntural perderá su efecto cuando se repliegue. Aboga así por un plan a medio plazo «mejorando la competitividad y productividad de las empresas».
Màxim Ventura y Ricard Murillo, economistas de Caixabank Research
Reclama evitar «los mecanismos de indexación automáticos» que harían aún más persistentes «las presiones inflacionistas y nos harían perder competitividad». Defienden que el Banco Central Europeo debe centrarse «en las medidas tendenciales de inflación y, sobre todo, en controlar expectativas». «Será necesario un pacto de rentas». concluyen.
Miguel Cardoso, economista de BBVA Research
El economista jefe para España de BBVA Research, Miguel Cardoso, ve poco «recomendable» las medidas encaminadas a fomentar la demanda, como la subvención de los combustibles y aboga por un pacto de rentas «transparente y parte del diálogo social». Y reclama además consenso: «Todos los agentes deben ser conscientes de que para mantener la inflación controlada durante los próximos meses, será necesario un sacrificio por parte de todos».
Almudena Semur, economista
La economista Almudena Semur se muestra contraria a aplicar una rebaja de los impuestos como norma general, pero esta experta si ve óptima la congelación de algunos de ellos para mantener el consumo. «No se debe cometer el error de un incremento de recaudación, viendo cómo paulatinamente la demanda interna va retrocediendo», advierte.
José María Romero, analista de Equipo Económico
«La base para el control de la espiral inflacionista es el anclaje de las expectativas», señala José María Romero, que cuestiona la coherencia de pedir ahora un pacto de rentas después de haber subido el SMI y indexado las pensiones al IPC. Respecto a los precios, entiende que «una reducción temporal y selectiva de impuestos» habría sido más eficaz que las políticas intervencionistas el Gobierno.
Pedro Aznar, profesor de Economía de Esade
Reconoce que el pacto de rentas puede ser «una medida eficaz», porque trata de repartir los costes de la inflación. Además, el profesor de economía de Esade, Pedro Aznar, ve «espacio para reducciones de impuestos que compensen las subidas de precios, quizás no generales pero si en productos concretos, y ahí hace falta un mayor esfuerzo por parte del Gobierno».
Miguel Ángel Bernal, socio de Bernal & Sanz Bujanda
Miguel Ángel Bernal apunta a la necesidad, ante la coyuntura, de deflactar los impuestos, y rechaza la idea de dar subvenciones antes que reducir los tributos. Y subraya el deber de reducir gasto público «desmedido». Asegura que los Presupuestos Generales son ya «papel mojado» con este IPC.
Massimo Cermelli, profesor en Deusto
Este profesor aboga por intervenir los mercados, la mejor opción sería fomentar y empujar la competencia interna entre compañías. «Se pueden romper determinados monopolios si se refuerza la competencia entre empresas en lugar de optar por intervenir». Asegura que es necesario «encontrar soluciones a largo plazo a los problemas derivados de la inflación y es clave encontrar soluciones que graven las cuentas públicas lo menos posible, adoptar reformas que vayan más allá de las contingencias electorales de las formaciones políticas. Ahora más que nunca se necesita de cooperación y responsabilidad de Estado».
Fuente: Abc.es