La Agencia Tributaria recaudó 305,4 millones de euros entre enero y junio de 2018 con el gravamen sobre premios de loterías, lo que supone un 8,3% menos que en el mismo periodo de 2017 (333,2 millones).
Así se desprende del ‘Informe Mensual de Recaudación Tributaria’ de junio de 2018, recogido por Servimedia, en el que se indica que el grueso de este impuesto se recaudó vía Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF).
En concreto, la Agencia Tributaria ingresó 294,6 millones a través del IRPF por este gravamen en los seis primeros meses de 2018, un 6,9% menos que un año antes.
Por su parte, a través del Impuesto de Sociedades se recaudaron 10,8 millones, lo que supone una reducción del 35,5% en comparación con los 16,7 millones del periodo enero-junio de 2017.
En los próximos meses la tributación del impuesto de loterías se verá afectada por una nueva modificación introducida en los Presupuestos Generales de 2018, que entraron en vigor el 5 de julio.
En concreto, el cambio eleva a 10.000 euros el importe exento de tributación en los premios de loterías para 2018, a 20.000 euros en 2019 y a 40.000 euros en 2020.
Evolución
El Gobierno de Mariano Rajoy anunció en 2012 su decisión de poner fin a la exención fiscal que disfrutaban los ganadores de premios de los sorteos de lotería y la puesta en marcha de un nuevo impuesto desde el 1 de enero de 2013. De esta manera, se creó un gravamen del 20% para los premios con una cuantía superior a los 2.500 euros.
En el conjunto de 2013 este gravamen consiguió recaudar 268,2 millones de euros (cabe recordar que estaba exento el sorteo de Navidad de 2012, aunque el premio se cobrara ya en 2013), lejos de los 824 millones que Hacienda estimó que se conseguirían.
La cuantía se elevó hasta 458,9 millones de euros en 2014 y se moderó ligeramente, hasta 451 millones, en 2015. En 2016 esta recaudación volvió a caer, en concreto un 3%, hasta situarse en 437,8 millones, mientras que en el pasado ejercicio 2017 los ingresos por este impuesto crecieron un 10,1%, hasta alcanzar los 482,3 millones.
Fuente: ElEconomista.es