Hacienda ha reforzado el plan de incentivos a sus funcionarios que se acojan al sistema de objetivos para elevar la recaudación. El Ministerio de Hacienda y los principales sindicatos -salvo el Sindicato de Técnicos del Ministerio de Hacienda (Gestha)- firmaron este lunes el nuevo Plan de Intensificación de Actuaciones (PIA) del año 2023, que prorrogará también durante el ejercicio de 2024.
El principal cambio respecto al plan anterior es que los sindicatos han conseguido que Hacienda firme el incremento de los incentivos a 12 pagos mensuales. Hasta ahora estaba en 10 pagas. El PIA, dotado con alrededor de 100 millones de euros, es un sistema de adscripción voluntaria para los trabajadores de la Agencia Tributaria «que asuman un compromiso de incremento cuantificable de su esfuerzo y dedicación». El nuevo acuerdo ha ampliado el plazo que tienen los funcionarios para acogerse al plan hasta el 26 de abril.
Por lo demás, el nuevo acuerdo mantiene las tablas de los incentivos y las cantidades a percibir por los funcionarios que se acojan. También mantiene los objetivos. En concreto, el PIA establece para estos funcionarios una intensificación del control del fraude tributario y aduanero. El plan determina un aumento de las inspecciones preventivas. En concreto, «las actuaciones para fomentar el cumplimiento voluntario en el Impuesto sobre el Valor Añadido (IVA) y el Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF)».
Para aquellos trabajadores que se acojan a este programa, el PIA ofrece un régimen de pagos a cuenta, con dos ingresos al año. Estos pagos van desde los 150 euros para los funcionarios de grupo A1, hasta los 67,50 euros para los funcionarios de grupo E.
Además, el Plan de Intensificación de Actuaciones también regula un régimen de pagos mensuales. Es el que ahora ha pasado de 10 a 12 pagas. La retribución en este caso va desde los 200 euros para el grupo A1 hasta los 90 euros par el grupo E.
Precisamente, el Sindicato de Técnicos del Ministerio de Hacienda (Gestha) no ha firmado de nuevo por estas diferencias. «Se mantiene la desproporcionalidad de los técnicos en el reparto final que, hasta la fecha, sitúa de promedio a los técnicos a 4.600 euros de los Inspectores y a tan solo a 1.200 euros de un C1, a 1.400 euros de un C2 y a 1.800 euros del personal subalterno. Un reparto inaceptable que desmerece la cualificación y el trabajo que realizan los técnicos», apuntan fuentes de Gestha a EXPANSIÓN.
Es previsible que el nuevo acuerdo sea el último alcanzado entre los sindicatos y el Ministerio. La Ley de Función Pública, que entrará previsiblemente en vigor en 2025, prevé que desaparezca este sistema.
Este plan nació en el año 2014. Hacienda reconoce que «en los últimos años se han mejorado los resultados recaudatorios como consecuencia de los niveles de exigencia de la organización, de la revisión de los métodos de trabajo y de la implicación de su personal». De este modo, destaca que el PIA «consiguió incrementar de manera sustancial la contribución de la Agencia Estatal de Administración Tributaria en el proceso de obtención de los ingresos tributarios necesarios para financiar los distintos servicios públicos y reducir el déficit público». Tras la aprobación del PIA los indicadores que muestran los resultados recaudatorios de las actuaciones de control han alcanzado los valores más altos de la historia de la Agencia Tributaria.
Los objetivos perseguidos por estos planes especiales se han adaptado a las prioridades que en cada momento se han ido marcando por la planificación estratégica de la Agencia Tributaria. Así, el Plan de 2017 puso especial énfasis en la intensificación y mejora de las actuaciones de lucha contra el fraude fiscal en el IVA. Esto logró un aumento significativo en la recaudación del impuesto.
En 2018, Hacienda añadió un nuevo bloque de actuación. Este sistema incluyó medidas preventivas, entre las que ocupaba un lugar central la potenciación de las actuaciones de información y asistencia al contribuyente «en aras de mejorar y facilitar el cumplimiento voluntario», sostiene Hacienda. En 2019 se intensificaron los proyectos de control a posteriori del fraude tributario y aduanero, fomentando a su vez el cumplimiento voluntario no sólo en el IVA sino también en el IRPF.
Fuente: Expansión