Se reduce el tipo en Sociedades del 25% al 15% durante 4 años para estas empresas, con más incentivos para la retribución a los trabajadores mediante ‘stock options’. Se mejora el régimen de atracción de profesionales y teletrabajadores.
La futura ley de Start up del Gobierno de Pedro Sánchez arranca su tramitación con una batería de incentivos fiscales, a la inversión y a la atracción de talento. Y lo hace en un momento favorable para el fomento de la innovación y la digitalización con los cambios tecnológicos y de teletrabajo que ha provocado la pandemia y con el impulso de la recuperación económica y la llegada de los fondos europeos. Todo esto puede favorecer la eficacia de una norma que se suma a las de gobiernos anteriores, que el sector ha solido considerar insuficientes.
El Consejo de Ministros aprobó ayer el borrador del anteproyecto, que se somete desde ayer por la tarde a audiencia pública hasta el 21 de julio, con lo que volverá al cónclave ministerial previsiblemente en septiembre y no entraría en vigor tras su tramitación parlamentaria hasta 2022. El texto, que se dirige a un espectro específico de empresas de reducida dimensión, deberá armonizarse con la futura Ley de Crecimiento Empresarial, que este mes también se llevará a trámite público, y que pretende acabar con las barreras -muchas de ellas, incentivos-, al crecimiento de las pymes.
- Requisitos. El borrador define como start up a una empresa de base tecnológica; con sede social y más de la mitad del empleo con contrato en España; con una edad inferior a cinco años (siete, en el caso de los sectores de biotecnología, tecnología e industrial); que no cotice en bolsa; que no haya repartido dividendos y con una facturación inferior a cinco millones de euros al año.
- Rebaja de Sociedades. Estas empresas verán reducido su tipo nominal del Impuesto sobre Sociedades del 25% al 15%, pero sólo por cuatro años. En el primer periodo impositivo en el que la base imponible sea positiva y en los tres siguientes siempre que mantenga la calificación de empresa emergente.
- ‘Stock options’. Se eleva de 40.000 a 100.000 euros la exención en el IRPF del empleado que reciba un pago con opciones sobre acciones, las stock options.
- ‘Business angels’. Para favorecer la inversión en start up, se mejoran los incentivos fiscales para business angels. Así, se eleva de 60.000 a 100.000 euros anuales la base máxima de deducción en el IRPF por inversión en empresas de nueva o reciente creación, así como el porcentaje de deducción (del 20% al 40%) y el periodo (que pasa a 5 años para todos los sectores y hasta 7 años para biotecnología, energía e industria).
- Nómadas digitales. Para contribuir a convertir España en un «hub empresarial y digital», según la vicepresidenta Segunda y ministra para Asuntos Económicos y Transformación Digital, Nadia Calviño, el borrador incorpora incentivos para atraer a España teletrabajadores de grandes multinacionales extranjeras, los «nómadas digitales», para los que se diseñará un visado específico. Se crea un régimen tributario para que se sometan al Impuesto sobre la Renta de No Residentes, relajándose los requisitos de acceso (pasando de 10 a 5 años el de no ser residente fiscal en España) y se amplía el periodo de su disfrute de 5 a 10 años, de lo que podrá beneficiarse su familia. En el caso de ejercicio de una actividad laboral, sólo podrá trabajar para empresas radicadas fuera del territorio nacional. Si es una actividad profesional, se permitirá trabajar para una empresa ubicada en España siempre que el porcentaje no supere el 20% del total de su actividad.
- ‘Ley Beckham’. Para atraer a España a trabajadores cualificados, el borrador contiene mejoras en el régimen del IRPF que incentiva su llegada, la Ley Beckham que estableció el Gobierno de Zapatero, y que ha sufrido desde la crisis anterior recortes. De momento, no hay cambios en los tipos, del 24% hasta rendimientos de 600.000 euros y del 47% si son superiores, pero sí se mejoran las condiciones de acceso de 10 a 5 años y se amplía su disfrute para ellos y sus familias, lo que comparten con los nómadas digitales.
- Pagos fraccionados. También se elimina la obligación de hacer pagos fraccionados en el Impuesto sobre Sociedades y en el Impuesto sobre la Renta de No Residentes en los 2 años posteriores a aquél en el que la base imponible sea positiva.
- Burocracia. Se elimina la obligación de obtener el número de identificación de extranjeros (NIE), pues bastará con el número de identificación fiscal (NIF).
- Ciudades pequeñas y zonas rurales. Se quiere incorporar estímulos para favorecer la ubicación fuera de grandes polos urbanos y en núcleos rurales. De momento, sólo la publicación de una lista de estos entornos en español e inglés.
- Aplazamiento de deuda. Las Start up podrán solicitar el aplazamiento de la deuda tributaria del Impuesto sobre Sociedades o del Impuesto sobre la Renta de no Residentes en el primer ejercicio en el que la base imponible sea positiva y en el siguiente, con dispensa de garantías y sin devengo de intereses de demora, por un periodo de 12 y 6 meses respectivamente.
SE AGILIZAN LOS TRÁMITES PARA ESTAS EMPRESAS
La acreditación de los requisitos que se exigen es ineludible para poder acogerse a los beneficios de la ley, que será eficaz frente a todas las Administraciones. La acreditación formal del emprendimiento innovador correrá a cargo de ENISA. El notario y el registrador controlarán los elementos objetivos que determinan el inicio y el fin de la condición de empresa emergente. «Si el primer intento fracasa, como es característico en proyectos de alto riesgo, pueden volver a aplicarse los incentivos de esta ley a una segunda empresa constituida por los mismos fundadores, pues debe darse otra oportunidad a quien, pese al fracaso, pero con la experiencia adquirida, quiera intentarlo de nuevo», según la Exposición de Motivos. El plazo para la inscripción será de 5 días contados desde el siguiente al de la fecha del asiento de presentación. El cese se agiliza y se cumplimentará por vía electrónica.
Fuente: Expansión.com