Los asesores fiscales denuncian un notablemente incremento del número de requerimientos que reciben desde el pasado mes de mayo, mientras que la Agencia Tributaria señala que no ha intensificado las actuaciones.
Desde hace varios meses, los despachos de asesoría fiscal vienen denunciando el “notable” número de requerimientos que les llegan por parte de la Agencia Tributaria. Aseguraron que en su inmensa mayoría son para comprobar deducciones de gastos de trabajadores autónomos y solicitan al organismo que “suavice” su actuación. Una sensación de colapso, que se repite en las diferentes comunidades autónomas y que sacan a la luz las diferentes asociaciones representativas de estos profesionales, pero que sin embargo se niega desde la Administración, que señaló que no se han intensificado las actuaciones.
Los requerimientos que envía la Agencia Tributaria son de las notificaciones más leves que puede enviar este organismo. Por norma general, a través de ellas se solicita aclarar o concretar una información, porque Hacienda ha cruzado los datos y ha detectado que no coinciden. Son obligatorios de contestar, ya que no hacerlo supondría una infracción. Y como señalaron estos profesionales, desde que la Administración volvió a funcionar tras el confinamiento, los requerimientos inundan sus despachos.
Durante el 14 de marzo y el 30 de mayo del año pasado, la Agencia Tributaria suspendió los plazos de prescripción y caducidad de todas las acciones contempladas en la normativa tributaria debido a la entrada en vigor del Real Decreto 463/2020, por el que se declara el estado de alarma por primera vez en España a causa de la Covid-19. Y es justamente esa fecha final, en la que vuelve a funcionar el organismo fiscal, la que apuntaron los asesores fiscales como el comienzo de su “colapso”.
“Levamos meses contestando requerimientos”
Así, el delegado territorial de Asociación Española de Asesores Fiscales (AEDAF) en Madrid – Zona Centro, Eneko Rufino, explicó que “tras la salida del confinamiento y la reanudación de la actividad de Agencia Tributaria, el pasado 30 de mayo, hemos visto como los requerimientos se han incrementado notablemente. Van dirigidos a todos los niveles empresariales y se han producido en todos los despachos”.
Además este experto fiscal, incidió en el hecho de que esta “sensación” de colapso por el elevado número de requerimientos es algo que se repite entre los profesionales de diferentes comunidades autónomas. “Es una sensación que tenemos todos y que me trasmiten compañeros de otras zonas” lamentó Rufino.
En este sentido, y hace poco menos de una semana, el presidente de la Asociación Profesional de Técnicos Tributarios y Asesores Fiscales de Andalucía, Eduardo Cortés, aprovechó el transcurso de unas jornadas de fiscalidad en las que participó, para exponer precisamente esta situación. Cortés dio a entender que los asesores fiscales habían dejado de ser asesores, para sólo dedicarse a contestar requerimientos.
Muchos requerimientos por cuantías muy bajas
Lo que más le sorprende al delgado territorial de AEDAF en Madrid Zona-Centro, Eneko Rufino, no solo es la “cantidad” de requerimientos, sino los motivos por los cuáles estos se producen. “Son cuantías económicas muy reducidas, de justificaciones de gastos de autónomos o de la RENTA” apuntó. Rufino detalló que es frecuente que lleguen requerimientos de “importes no muy grandes, como de 300 o 500 euros». Se trata de algo inusual, “sobre todo porque el nivel de justificación que exige la AEAT es muy grande para el poco dinero que se reclama» afirmó el asesor.
Según explicó muchos de estos requerimientos los hace la propia maquinaria de la Agencia Tributaria: cruzan los datos de los que disponen, no les cuadran y emiten el requerimiento. Una forma de actuar de la AEAT muy eficiente y que podría ser la causante del alto volumen de estas notificaciones, según el presidente de la Federación Española de Asociaciones Profesionales de Técnicos Tributarios y Asesores Fiscales (Fettaf), Joan Torres.
El presidente de organización nacional de asesores fiscales coincidió con Rufino, en que el problema del alto volumen de requerimientos podría estar en el hecho de que se producen de forma “automática”.
Estas notificaciones llegan en mal momento para los autónomos
Si bien Torres reconoció, como el resto de profesionales, que habían aumentado el número de requerimientos que llegaban. “Es algo que he notado en mi despacho” dijo. También apuntó que se debía simplemente a que “la Agencia Tributaria está cumpliendo con la normativa fiscal y si detecta una información que no concuerda, procede a requerir justificaciones”.
Según explicó el presidente de FETTAF, aparte de la automatización del sistema, el alto número de requerimientos producidos podría deberse a que no se estén haciendo las cosas correctamente. “Los negocios están pasando por una situación muy difícil a nivel financiero. Sus dueños apenas tienen para comer y cuando les llamas para solicitar información o les avisas de que hay que pagar un modelo, no quieren oír hablar del tema. Lo que conlleva, un requerimiento por no presentar el modelo o no pagar directamente”.
A su modo de ver, estamos ante una situación “complicada. Porque, por un lado, los negocios están pasando por dificultades económicas y no pueden atender correctamente a todas las obligaciones fiscales. Pero, por otro lado, la Agencia Tributaria no puede dejar de cumplir la ley, de enviar requerimiento y de recaudar”.
Torres, como presidente de la Federación Fiscal, es partidario de que se “suavice” la norma. “Hay que luchar por cambiar la ley. El año pasado se peleó para que la Agencia Tributaria dejase de actuar por tres meses. Tal vez, después del transcurso de casi un año de pandemia, es momento de volver a realizar esa paralización” aventuró.
¿Qué dice la Agencia Tributaria sobre el incremento de requerimientos?
Las diferentes asociaciones de asesores fiscales explicaron que la Agencia Tributaria les había negado directamente que se hubiese producido un incremento del número de las actuaciones. En concreto, el delegado territorial de Asociación Española de Asesores Fiscales (AEDAF) en Madrid – Zona Centro, Eneko Rufino, dijo que “la Administración nos aseguró tras el parón, que su intención no era hacer en nueve meses el trabajo que debía de haber hecho en 12. Pero luego la realidad a la que nos hemos enfrentado ha sido otra completamente distinta y estamos colapsados de requerimientos”.
Sobre este respecto, los inspectores de la Agencia Tributaria comentaron que ellos se atañen a los planes de comprobación y que para realizar cualquier tipo de comprobación y requerimientos hace falta indicios. Además, se escudan en el sistema y en que está muy automatizado.
Las notificaciones de la Agencia Tributaria los viernes por la tarde
Independientemente de los requerimientos, el delegado de la AEDAF para Madrid Zona-Centro, Eneko Rufino, detalló otros dos importantes problemas que tienen los asesores fiscales con la AEAT:
- Las notificaciones electrónicas de los viernes a última hora
Según dijo este asesor, muchas de las notificaciones que reciben sus clientes autónomos de la Agencia Tributaria les llegan los viernes a última hora. “Puede parecer algo sin importancia, pero es verdaderamente un problema y un incremento de trabajo para nosotros” dijo Rufino. Que continuó explicando que “suelen llegar a las 23 horas de la noche, el cliente se asusta y les escribe. Nosotros no podemos dejarle con la duda todo el fin de semana, por lo que nos tenemos que poner a trabajar”.
En este sentido, el experto fiscal planteó porqué no atrasar el envió de esa notificación hasta el lunes. “En estos momentos en los que se promueve la desconexión digital, la AEAT debería predicar con ejemplo”.
- El alto nivel de denuncias ganadas a la AEAT
Otro tema muy discutido entre los asesores fiscales se produce cuando el Ministerio de Hacienda publica las estadísticas de reclamaciones. Según Rufino, “los datos muestras una litigiosidad muy baja, porque prácticamente de 18 millones de actos que dicta la Agencia Tributaria al cabo de un año, sólo se recurren menos del 1%. Pero de los que se recurren, más de la mitad de los casos se acaban ganando. Y eso no se debe a que los asesores son muy buenos eligiendo los temas qué recurren. Esto se debe a que se recurre mucho menos de lo que se debería, porque son cuantías muy pequeñas y no merece la pena el gasto en el proceso por 300 euros”
Según este asesor, un autónomo antes de recurrir prefiere pagar y olvidarse, por lo que la mayoría de las situaciones no se denuncian.
Fuente: Autonomosymeprendedor.es