Un total de 600.000 empresas se acogieron en 2 meses por el Covid. Abonan en periodo voluntario el 92% de las cantidades aplazadas. Gascón asegura que se encontraron con «una avalancha» de solicitudes.
Los aplazamientos, la única medida de alivio fiscal para las empresas y autónomos por el Covid, generaron en menos de tres meses un aluvión de un millón de solicitudes a la Agencia Tributaria (Aeat). Un total de 600.000 empresas se acogieron al aplazamiento de los impuestos aprobado por el Gobierno en plena crisis del coronavirus el año pasado. Las empresas acogidas a la medida han abonado en periodo voluntario el 92% de las cantidades aplazadas.
Así lo destaca Jesús Gascón, director General de la Agencia Tributaria, que este jueves participó en el Congreso Fiscal 2021, organizado por Lefebvre. «Son unos datos positivos para un año difícil a causa de la pandemia», explica Gascón sobre los aplazamientos. El director general de la Aeat reconoce que se encontraron con «una avalancha» de peticiones por parte de pymes y profesionales.
La medida de aplazamiento fue la única medida de alivio fiscal aprobada por el Ejecutivo durante el año pasado, junto con la suspensión y el aplazamiento de los plazos en el ámbito fiscal. El aplazamiento del ingreso de la deuda tributaria se configuró para todas aquellas declaraciones o liquidaciones y autoliquidaciones cuyo plazo de presentación e ingreso finalice entre el 12 de marzo y el 30 de mayo de 2020, ambos inclusive.
El resto de las grandes potencias europeas centraron en la bajada de impuestos su estrategia para evitar una recaída económica en la crisis del coronavirus. Durante el periodo que estuvo activado el aplazamiento como única medida de alivio, la rebaja de impuestos de Alemania alcanzó los 42.000 millones de euros, el 1,2% de su Producto Interior Bruto (PIB). Berlín activó un plan de apoyo fiscal para pymes y familias, que benefició también a las rentas altas al reducir el número de contribuyentes que tributan al tipo máximo en el IRPF tras subir el límite de ingresos.
Este estímulo aprobado por Berlín se sumó a los 34.100 millones de euros de rebaja de impuestos que ya había aprobado el Gobierno de Merkel, como refleja su programa de estabilidad de este año enviado a Bruselas.
Italia siguió los pasos de Berlín e inició los procedimientos para varias rebajas fiscales -entre ellas, una rebaja sustancial de los tipos del IVA- en su plan de recuperación. Sin embargo, el país había aprobado ya entonces un estímulo fiscal por valor de 17.100 millones de euros, entre exenciones, subvenciones y créditos fiscales.
Gascón adelanta además los datos de recaudación, a la espera de los informes de los últimos meses. En la línea de lo que avanzó elEconomista este lunes, la recaudación caía un 9% en noviembre, dos puntos por debajo del 11% que cayó el PIB, por lo que destacó su buen comportamiento y el de los cumplimientos voluntarios por parte de los contribuyentes. En este sentido, Gascón considera esta buena evolución «muy importante» y «una buena noticia», al mantenerse la consolidación del cumplimiento voluntario, cuyo crecimiento en años anteriores ya venía siendo mayor que el de la economía, y destacar que el dato de 2020 acaba con el miedo existente a que la voluntariedad retrocediera cuando la economía cayera, como ocurrió en la anterior crisis.
Las estimaciones de recaudación de la Agencia Tributaria para el año 2020 anticipan una subida récord de la presión fiscal de alrededor de dos puntos que acercarán el indicador en torno al 37%. La ministra de Hacienda, María Jesús Montero, manifestó este jueves la intención del Gobierno de aumentar la presión fiscal «para igualarla con la del resto de países europeos».
Por su parte, La ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, defendió en agosto la necesidad de incrementar la recaudación fiscal en torno a los 80.000 millones de euros. Sin embargo, el esfuerzo fiscal se sitúa entre los más altos, incluso por encima de algunos países como Dinamarca, Suecia, Finlandia u Holanda, paradigma de impuestos altos.
La litigiosidad disminuye un 10%
El director general de la Agencia Estatal de Administración Tributaria (Aeat), Jesús Gascón, señaló este jueves que las notificaciones tributarias realizadas por la Agencia en 2020 se redujeron en un 10% como consecuencia de la reducción de su actividad provocada por la pandemia de Covid-19 y el estado de alarma, lo que, a su vez, dio lugar a que los recursos de los contribuyentes también se redujeran en aproximadamente un 10%.
Así lo indicó durante su participación en el Congreso fiscal 2021 organizado por Lefebvre, en el que indicó que durante 2020 la caída de las notificaciones practicadas por la Agencia Tributaria llegó a ser del 43% respecto al año anterior, debido al impacto del estado de alarma, aunque posteriormente la Aeat fue recuperando su actividad, cerrando el año con un 10% menos de notificaciones que durante el año 2019.
Gascón: «Esto sale al paso de una creencia natural que es que cuando vienen mal dadas la recaudación cae y se multiplica la litigiosidad»
Esta reducción de las notificaciones, apuntó Gascón, tuvo consecuencia «una buena noticia», que es que «obviamente la conflictividad, la litigiosidad tributaria, también se ha reducido», con otro 10% menos de recursos y reclamaciones económico-administrativas. Asimismo, el director de la Agencia agregó que esto, a su vez, «significará mayores facilidades para agilizar los procedimientos en los tribunales económico-administrativos y en los tribunales de justicia».
De esta forma, resaltó el director de la Aeat, «esto sale al paso de una creencia natural que es que cuando vienen mal dadas la recaudación cae y se multiplica la litigiosidad». «Bueno, pues la recaudación cae pero menos que la economía, y la litigiosidad no ha crecido, sino que se ha reducido y se mantiene en términos relativos», subrayó.
En relación a la Campaña de la Renta 2020, que comenzará el 7 de abril, Gascón destacó que volverá a tener mucho peso la atención telemática, ya que, tras la pandemia, «hay comportamientos de los ciudadanos que han venido para quedarse». En este sentido, recordó que en la Campaña 2019, debido a la pandemia y el estado de alarma, se potenció la asistencia telefónica, lo que Gascón que consideró «un éxito rotundo»,
Fuente: ElEconomista.es