Ante los cobros del paro sin retención, correctos o no, el Fisco hará caja

El fantasma de los ERTE (Expediente de Regulación Temporal de Empleo) volverá la próxima primavera e irrumpirá de lleno en la declaración de la renta de los miles de empleados que este año han estado en uno de estos expedientes. Los contribuyentes que se han visto afectados por un ERTE, aunque cobren menos de 22.000 euros en total si han percibido más de 1.500 euros de un segundo pagador, tendrán que presentar la declaración de la renta y Hacienda ajustará.

Ante ello, el sindicato de Técnicos de Hacienda (Gestha) aconseja a los empleados que pidan a sus empresas que les eleven la retención en sus nóminas en esta recta final de año, aunque ya, a noviembre, el margen es reducido.

Porque los trabajadores que hayan estado en ERTE, pese a haber cobrado menos del umbral de 22.000 euros que rige para un pagador, deberán presentar la declaración de la renta si han recibido del SEPE más de 1.500 euros -o de otro pagador- y en total han percibido rendimientos superiores a 14.000 euros.

A ello se le suman los errores que ha podido cometer el SEPE y que volverán a tener repercusión a la hora de rendir cuentas a Hacienda. Si al principio de la pandemia hubo problemas para cobrar por parte de miles de trabajadores por el alud de ERTE en las oficinas del servicio público de empleo, ahora ha comenzado a ocurrir la situación contraria. Empleados que han salido del ERTE, otros que han vuelto a la actividad y se les ha incluido en un nuevo expediente de empleo cobrando indebidamente prestación o empleados en ERTE que han percibido más paro de lo que les correspondía. La casuística es variada pero tiene un resultado común a ojos de la Agencia Tributaria: pese a los errores que haya podido cometer el SEPE, han percibido prestaciones que no eran correctas, todas ellas sin retención en IRPF.

El Registro de Economistas y Asesores Fiscales (Reaf) avisan: si antes del 31 de diciembre no se ha arreglado la situación, Hacienda les cobrará en la Renta del año que viene el IRPF de los cobros indebidos. Incluso si la situación ya parece haberse reparado, hay que cerciorarse de que Hacienda lo sabe, avisan los asesores. Podrían darse casos de prestaciones de paro devueltas antes del 31 de diciembre y que de ellas la Agencia Tributaria cobrase el IRPF al trabajador.

Porque, errores al margen, buena parte de los casi cuatro millones de empleados que han estado en ERTE este año en algún momento, deberán hacer cálculos para pagar a Hacienda en la próxima declaración. Según los cálculos efectuados por el Reaf, si un trabajador ha estado cuatro meses en ERTE al 100% y antes cobraba un sueldo medio de 23.646 euros, si no ha tenido retención alguna por parte del SEPE de los 4.392 euros pagados en concepto de prestación, deberá pagar a Hacienda 1.322 euros el año que viene.

Para un trabajador en la misma situación con un sueldo de 30.000 euros y haya recibido 4.392 euros del SEPE, la factura fiscal será de 1.026 euros, calcula el Reaf. Estas cantidades deberían haber tributado y sufrido retención en 2020 pero, al no haberlo hecho, es en 2021 cuando Hacienda ajusta las diferencias. Por ello, los contribuyentes afectados deben estar sobre aviso. Los asesores fiscales del Reaf aconsejan en los casos que salga a ingresar postergar el momento de hacer la declaración a junio.

Fuente: Abc.es