Crean una figura impositiva sobre la producción y transporte de energía eléctrica. En 2020 se incrementará la tasa turística y la que grava las bebidas azucaradas envasadas. El tramo autonómico del IRPF se bajará en los tramos más bajos y se subirá en los más altos.
El Govern liderado por Quim Torra (JxCat) y Pere Aragonès (ERC) y los comunes acordaron este lunes una reforma tributaria que, en 2020, permitirá subir en 173 millones de euros los ingresos de la Generalitat.
Las modificaciones tributarias irán entrando en vigor a lo largo del año. Cuando todas ellas estén en vigor durante un plazo de 12 meses, se estima que generarán una recaudación anual adiciona lde 573 millones de euros.
El paquete de medidas afecta a seis figuras impositivas ya existentes: el tramo autonómico del IRPF, Sucesiones, Transmisiones Patrimoniales, pisos vacíos y bebidas azucaradas envasadas.
Se crea también un nuevo tributo medioambiental que grava el impacto territorial de las instalaciones de almacenamiento, transformación y transporte de electricidad, y las redes y antenas de telefonía y servicios telemáticos.
Reforma del IRPF
El tramo autonómico de esta figura impositiva será más «progresivo». Así, el actual cuarto tramo se subdivide en dos subtramos: uno que irá entre los 53.407,2 a 90.000 euros anuales (que seguirá tributando al 21,5%) y otro de 90.000 eros a 120.000 euros anuales, que sube al 23,5%, dos puntos más que en la actualidad.
El tramo que va de 120.000 a 175.000 euros anuales sube del 23,5% al 24,5%, un punto más. El tipo más alto, a partir de los 175.000 euros anuales, seguirá en el 25,5%.
Otra novedad del IRPF es que sube el mínimo exento, de 5.550 euros a 6.105 euros, que afectará al 10% de los contribuyentes más pobres. «Es la primera vez que se hace una reforma pensando en las rentas más bajas», subrayó el número dos de la Generalitat y consejero de Economía y Hacienda, Pere Aragonès (ERC).
Según los cálculos del Govern, con esta reforma, ingresará 189,8 millones de euros en el primer año en el que la medida esté totalmente en vigor.
Más progresividad en Sucesiones
El impuesto de Sucesiones y Donaciones se situó en mínimos tras la llegada de Artur Mas (de la extinta CiU) a la Generalitat a finales de 2010.
A partir del año que viene, se introducen nuevos coeficientes a la hora de calcular esta figura impositiva en función del patrimonio existente en diferentes grados de parentesco, para que sea más «progresiva».
Tributos inmobiliarios: nuevo tipo reducido
En cuanto al Impuesto de Transmisiones Patrimoniales Onerosas, se reduce a la mitad el tipo que pagan las familias monoparentales que ingresan menos de 30.000 euros anuales. Pasará del 10% actual al 5%.
Con esta reforma, el Govern ingresará 13,17 millones de euros anuales.
Sube la tasa turística
El nuevo año llega con cambios en la tasa turística. Al nuevo recargo acordado por el Ayuntamiento de Barcelona, se sumará una revisión al alza de todos los tipos a nivel autonómico.
Si en la actualidad, la tasa se sitúa entre los 0,65 euros y los 2,25 euros, con la reforma, los turistas que se alojen en un hotel, un piso turístico, un crucero u otro tipo de equipamiento pagarán entre un euro y 3,5 euros por persona y noche.
El importe depende de la categoría y tipo de establecimiento. Con esta modificación, la Generalitat recaudará 20,9 millones de euros más.
Impuesto sobre los pisos vacíos
Se reduce sustancialmente la bonificación que tenían los grandes propietarios de pisos que destinaban una parte de su ‘stock’ de viviendas a programas de alquiler asequible. Con esta revisión, el Govern ingresará 3,5 millones de euros al año.
Impuesto sobre las bebidas azucaradas envasadas
Tres años después de la puesta en marcha, se actualizan los tipos de esta figura impositiva, con el objetivo de contribuir al descenso del consumo a los refrescos, zumos y otro tipo de bebidas envasadas con exceso de azúcar.
Las bebidas que lleven entre cinco y ocho gramos de azúcar por mililitro, pasarán a pagar entre 0,08 y 0,10 euros por litro.
Los refrescos y otras bebidas con más de ocho gramos de azúcar por mililitro, pagarán entre 0,12 euros por litro y 0,15 euros por litro.
Se estima un impacto presupuestario de 6,4 millones de euros en 12 meses con esta modificación tributaria.
Nuevo impuesto medioambiental
Siguiendo el ejemplo de otras comunidades autónomas, se creará una nueva figura impositiva medioambiental, que grava «el riesgo de deterioro que se ocasiona en Catalunya» dos actividades económicas: la producción, almacenamiento o transformación de energía eléctrica; por una parte, el transporte de electricidad, telefonía y datos a través de redes o puntos fijos de suministro, por otra.
Con esta nueva figura impositiva, el Govern estima que ingresará 145,1 millones de euros anuales.
En cuanto a la producción y transformación de energía, se pagarán 0,005 euros por kilovatio y hora. Para las centrales hidroeléctricas cuya potencia instalada no supere los 10 megawatios, el importe se situará en los 0,001 euros.
Las empresas de telefonía y datos pagarán 700 euros por kilómetro, palo o antena que tengan instalado en Catalunya.
En cuanto al transporte y almacenamiento de energía, habrá dos tramos: 700 euros para los palos y kilómetro de línea de tensión inferior a los 400 kilovatios, y 1.200 euros, para las superiores a esta cifra.
Según precisó Aragonès, se prohibirá explícitamente a las compañías «recargar» la tasa a sus abonados.
Pacto
Según Aragonès, es la primera vez en los últimos años que hay un acuerdo sobre fiscalidad entre el Govern y uno de los grupos que forman la oposición. «En Catalunya se necesitan grandes consensos», dijo el dirigente de ERC, que aseguró que el pacto refleja que la comunidad autónoma es «plural».
«Aún estamos muy lejos con el Govern en lo relativo al gasto público en cada consejería, pero sí que estamos de acuerdo en una reforma fiscal redistributiva y justa», señaló la presidenta de Catalunya en Comú Podem en el Parlament, Jéssica Albiach. «Llevamos años pidiendo un acuerdo de este tipo», agregó la parlamentaria.
El Govern también se compromete a poner en marcha durante el año 2020 de dos nuevos tributos sobre las actividades económicas que generan dióxido de carbono y sobre la emisión de gases contaminantes por parte de los grandes barcos en los puertos catalanes.
Ambos se sumarían al impuesto que se empezará a aplicar a finales del próximo año sobre la emisión de dióxido de carbono (CO2) por parte de los vehículos de tracción mecánica.
Fuente: Expansión.com