La edil y su marido cargaron a la empresa un mínimo de 684.000 euros en gastos no deducibles. Tras la sanción de 2016, siendo Villacís concejal y administradora de la sociedad, Iuriscontencia tuvo que aflorar 483.000 euros en pérdidas.
La Agencia Tributaria inspeccionó varios ejercicios fiscales de Iuriscontecia S.L., la sociedad creada y administrada por Begoña Villacís y su esposo, Antonio Suárez-Valdés, y halló abundantes irregularidades. La conclusión de las actas levantadas por Hacienda es que la sociedad funcionaba como una pantalla para pagar menos impuestos. La inspección, que incluyó una multa de casi 70.000 euros, es del año 2016, cuando los responsables legales de Iuriscontencia S.L. eran sus dos administradores solidarios, Begoña Villacís, que hacía un año que era concejal en el Ayuntamiento de Madrid, y su marido.
El inspector anuló el pagó de 104.872,24 euros en Impuesto de Sociedades, equivalente a alrededor de cuatro años de actividad, porque los ingresos generados no debieron facturarse a través de una sociedad, que se dedica a la asesoría legal. Hacienda es muy estricta respecto a los ingresos generados por profesionales colegiados, como los abogados, el caso de Villacís –que trabajó para la sociedad– y su pareja. La Agencia Tributaria deriva esos ingresos a la persona física, que debe pagar vía IRPF.
Además de tumbar la cuenta de resultados de la sociedad, la Agencia Tributaria calculó en 143.555,65 euros la cantidad defrauda en el IVA. Esto significa que Iuriscontencia S.L. se imputó facturas por importe de 683.598 euros que supusieron una devolución de 143.555,65 euros, el 21% de IVA (la base imponible sería mayor si incluyera facturas con IVA reducido al 10%). Además de obligar a la empresa a ingresar ese IVA, Hacienda impuso una multa de casi el 50 por ciento de lo defraudado, 69.676,67 euros. Una vez descontado lo pagado irregularmente vía Impuesto de Sociedades, la empresa tuvo que ingresar 108.360,08 euros en las arcas del fisco.
No responden
ABC se puso en contacto con la líder madrileña de Ciudadanos, pero remitió a su marido:«Preguntadle a él, yo no me encargaba de la sociedad». Este diario habló con Antonio Suárez-Valdés, quien dijo tener que consultarlo con su contable y pidió las preguntas por escrito. Enviamos la consulta el lunes por correo electrónico, pero no ha habido respuesta. La mayor operación sujeta a IVA que hizo la sociedad fue la construcción del domicilio de la pareja, una casa de 667 metros cuadrados en Villanueva de la Cañada que fue dada de alta como despacho. La obra nueva se declaró en 2012, por lo que entraría en el plazo de inspección de Hacienda.
El depósito de cuentas de 2017, el ejercicio posterior al de la sanción tributaria, demuestra que la contabilidad de Iuriscontencia dio un vuelco. Antes de la multa de Hacienda, la sociedad gozaba de buena salud financiera, siempre en positivo, con beneficios acumulados de 473.000 euros en el periodo 2012-2105, una media de 118.000 euros al año antes de impuestos.
Después, en el ejercicio 2017, la sociedad tuvo que contabilizar «resultados negativos de ejercicios anteriores» por importe de 483.452,64 euros. Estos números rojos se «comieron» un remanente de más de 390.000 euros, dejándola sociedad en una situación comprometida, según los análisis contables de Iuriscontencia consultados por ABC.
Begoña Villacís asevera que vendió sus acciones de la sociedad en 2009 y que no la administra desde septiembre de 2011, pero ni firmó su renuncia ante notario ni la llevó al Registro Mercantil hasta marzo de 2018, cuando se hizo efectivo el cese como administradora.
Hasta esa fecha fue administradora solidaria con plena capacidad legal. El 2016 su marido dejó constancia ante notario y en el Registro de la Propiedad de que no se había producido cese alguno.
Fuente: Abc.es