Facilitará una aplicación móvil y llamará por teléfono a quienes lo soliciten.

La Agencia Tributaria anticipará este año algunos servicios de asistencia -datos fiscales, nuevo portal móvil, envío de misivas por correo-, entre las más destacadas para que los contribuyentes puedan realizar su declaración nada más iniciarse el periodo de declaraciones, previsto para el próximo 4 de abril.

Además, se establece una nueva forma de comunicación a través de una App para el teléfono móvil -que se obtendrá en Google o Apple-, que permitirá presentar declaraciones de una forma sencilla, al tiempo que incrementará la asistencia telefónica -las conocidas como llamadas salida- para algunos perfiles de contribuyentes en un intento de evitar los desplazamientos a las oficinas de la Aeat, a través de lo que han dado en llamar Plan Le Llamamos.

Llamadas a las horas elegidas

Este Plan permitirá recibir una llamada de la Aeat y, a través de ella, presentar la declaración. Tras solicitarla, las citas se facilitarán cada 15 minutos y las llamadas se efectuarán entre las 9 y las 20:30 horas.

Podrán emplear este servicio los contribuyentes con unos rendimientos del trabajo y del capital mobiliario inferiores a 65.000 y 15.000 euros, respectivamente, con un máximo de un único capital inmobiliario, con ganancias y pérdidas patrimoniales derivadas o no de transmisiones, salvo las que correspondan a actividades económicas, y con rentas procedentes del régimen de atribución de rentas de capital mobiliario e inmobiliario.

La App, mientras tanto, estará disponible desde el próximo 15 de marzo para poder preparar la declaración, 20 días antes del comienzo de la campaña el 4 de abril, pero no se podrá presentar hasta el inicio de la campaña. En ella, estarán disponibles, al igual que en la web de la Aeat los datos fiscales.

Así, 4,8 millones de contribuyentes, aquellos de los que la Agencia Tributaria dispone de toda su información fiscal, podrán presentar la declaración de la renta de 2017 a través de la App, según ha avanzado este miércoles el director del Departamento de Gestión de la agencia, Rufino de la Rosa.

La aplicación permitirá no sólo gestionar las declaraciones del propio contribuyente, sino también las de sus allegados y familiares, hasta un máximo de 20 números de identificación fiscal (NIF) distintos, para poder incluir a aquellos menos familiarizados con las nuevas tecnologías y ayudarles a declarar.

Estas medidas parten de la experiencia de las pasadas campañas. Así, en el ejercicio pasado, un total de 860.000 contribuyentes no realizó ningún cambio en su declaración y 144.000 personas que solicitaron cita para que les ayudasen a realizar su declaración. Es a este colectivo a quien va dirigido fundamentalmente el programa de llamadas telefónicas.

Más de la mitad de los contribuyentes -el 52 por ciento- presentó el pasado año su declaración en los dos primeros meses de la campaña y más de seis millones habían recibido antes de concluir el mes de mayo sus devoluciones. La campaña pasada la presentación por Internet ascendió hasta los 17,4 millones de declaraciones, el 88 por ciento del total.

Servicios que se reducen

Este año se dejarán de enviar mensajes SMS con el número de referencia y los avisos, que se recibirán en la App, a través de la cual se podrá solicitar el número de referencia RENO, con el que se podrá acceder al programa Renta Web.

La Aeat ha ido reduciendo el número en envíos postales que incluyen los borradores, pasando de enviar casi 13 millones de propuestas en 2010 a los 625.700 del pasado año. De la Rosa ha explicado que de los borradores enviados en 2017, sólo 727 se presentaron. A la vista de estas cifras, la Aeat ha decidido que este año no realizará envíos de declaraciones con los borradores.

El 15 de marzo comenzarán los envíos postales. El primer colectivo que recibirá una carta con sus datos fiscales, el número de referencia y la información de los servicios de asistencia, será el de los contribuyentes que, cuando acudieron a las oficinas de la Aeat, se limitaron a confirmar su declaración sin modificaciones.

Fuente: ElEconomista.es